Renovemos a Cartagena

Por Ernesto Gutierrez Castillo

Especialista en derecho urbanístico y administrativo.

info@eglegal.co www.eglegal.co

Disponible también en el Periódico El Universal: https://www.eluniversal.com.co/opinion/columna/renovemos-a-cartagena-FN3249263

Bazurto, frente a la Ciénaga Las Quintas y estratégicamente ubicado, con sentido histórico, cultural, gastronómico, ambiental y económico, es un ejemplo más de los muchos sectores y barrios de Cartagena que han sido descuidados y no han sido aprovechados de la mejor manera.

Y es que en todas las ciudades podemos encontrar sectores que contienen un alto valor para la reactivación económica, social y territorial, que están urgidos de un empujón y de iniciativas que le permitan mostrar todo su potencial. Estos empujones podemos dárselos mediante un instrumento de planificación denominado plan parcial de renovación urbana. Este puede ser formulado y ejecutado por promotores privados, por la comunidad o por las administraciones públicas, y sirve para que las ciudades se apropien de los mencionados sectores, transformar su ambiente urbano, realizar cambios en el uso del suelo, construir proyectos inmobiliarios, tener mayor aprovechamiento urbanístico, actualizar la dotación de servicios públicos domiciliarios (acueducto, alcantarillado, energía, gas, teléfono, internet) y su estructura de servicios urbanos básicos (espacio público, sistema de transporte y equipamientos colectivos).

Pero es curioso que, en una ciudad como Cartagena, hasta el día de hoy, no se haya ejecutado ningún plan parcial de renovación urbana.

Siguiendo con el ejemplo de Bazurto, el Plan de Ordenamiento Territorial vigente estableció una serie de proyectos estratégicos entre los cuales está “El Sistema de Mercados”, con el fin de descentralizar la actividad de abastecimiento de alimentos. Con este proyecto, el Distrito definiría mercados de abastecimiento para distintas zonas de la ciudad y su ejecución, le permitiría a este sector su transición a un parque interactivo de la cultura, ciencia y tecnología, lo convertiría en un punto de intercambio del sistema de transporte masivo urbano multimodal de pasajeros y permitiría la implementación de actividades residenciales y comerciales; todo esto con la adopción de un plan de renovación urbana. Dicho Plan se adoptó mediante el Decreto 1490 de 2007, pero a la fecha se encuentra suspendido sin que se haya ejecutado en lo absoluto.

A pesar de que el POT de la ciudad no consagra todos los instrumentos de planificación existentes -que deberían ser incluidos en el nuevo POT-, si consagra de manera general a los planes parciales de renovación.

En Cartagena, también están determinadas las áreas con tratamiento de renovación urbana, que son aquellas que por sus atributos y potencialidad deben ser objetivo de acciones orientadas a una transformación que privilegie el espacio público y la imagen urbana de la ciudad, permitiendo sobre ellas actuaciones en las que puede haber cambios de uso y de intensidad y la optimización de servicios públicos, mediante la implementación de planes parciales de renovación urbana. Entre estas áreas podemos encontrar el Barrio Chino, San Francisco, La Esperanza, Olaya Sector 11 de Noviembre, Nariño, La Paz, El Bosque, Torices, entre otros. Juntas comprenden un área de 996 hectáreas aproximadamente.

El Plan de Desarrollo Distrital 2020/2023 vigente, trae consigo una serie de objetivos en este tema, específicamente en su “Programa Integral de Caños, Lagos, Lagunas y Ciénagas”, donde se establecen proyectos relacionados con el saneamiento ambiental y navegabilidad de los cuerpos de agua, generación de vías, ciclovías, espacio público, equipamiento urbano y transporte acuático, derivados de la renovación urbana en la zona de influencia de dicho programa. Además, en la “Línea Estratégica de Instrumentos de Ordenamiento Territorial”, se reconocen amplios sectores del suelo urbano clasificados con el tratamiento de renovación urbana, especialmente en los bordes de cuerpos de agua (bahía, canales y lagos interiores) con potencial inmobiliario y paisajístico, en los cuales se presenta deterioro ambiental, conflictos de uso y ocupación del suelo, que pueden ser objetivo de los mencionados planes parciales.

Como Cartagenero, visiono un Mercado de Bazurto y a la Ciénaga Las Quintas recuperados, que a su vez cuenten con grandes equipamientos culturales y culinarios que impulsen la economía, con espacio público y medios de transporte terrestres y acuáticos; visiono a la vía perimetral conectando la ciudad y que todos los barrios aledaños a la Ciénaga de la Virgen tengan un desarrollo de cara a este ecosistema; y visiono a todos estos barrios con un territorio renovado que le permita recuperar y desarrollar su identidad.

Los actores interesados en el desarrollo urbanístico e inmobiliario pueden promover en mayor medida, la formulación de estos planes parciales de renovación urbana, que le permitirán a ellos y a los habitantes tener grandes beneficios y generar para la ciudad la recuperación y creación de espacio público, formalización y reactivación de la economía y propiciar la construcción de grandes equipamientos en asociación con la administración.